Taiwán luego del devastador terremoto de magnitud 7.4

Los esfuerzos de rescate se intensifican en Taiwán luego del devastador terremoto de magnitud 7.4 que sacudió la región, desencadenando deslizamientos de tierra y el colapso de estructuras. La tragedia ha cobrado la vida de al menos nueve personas, dejando más de 900 heridos y más de 100 edificios gravemente dañados, en lo que se convierte en el terremoto más potente que ha sacudido Taiwán en los últimos 25 años.

Los datos preliminares del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) indican que el terremoto ocurrió a las 7:58 hora local, a una profundidad de 34.8 kilómetros, con epicentro ubicado 18 kilómetros al sur de la ciudad de Hualien. A este suceso le siguieron 29 réplicas de magnitud superior a 4.0, extendiendo su impacto a lo largo de la isla, incluida la capital, Taipei. Se prevé que las réplicas continúen en los próximos días, algunas con una magnitud estimada de hasta 7.

El condado de Hualien, epicentro del terremoto, alberga a unos 300,000 residentes, siendo aproximadamente 100,000 habitantes en su ciudad principal. Sin embargo, muchas comunidades costeras y montañosas remotas, donde reside una parte significativa de la población, podrían enfrentar mayores desafíos para la evaluación y asistencia ante la magnitud del evento.

La interrupción del suministro eléctrico afectó a más de 91,000 hogares, mientras que los hospitales de Taipei, la capital, continúan operativos a pesar de los daños ocasionados por el terremoto. Además, el Gobierno de los Estados Unidos, bajo la administración de Joe Biden, está atento a la situación y está listo para brindar apoyo, según declaraciones de un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.

En medio de la devastación, la resiliencia y la solidaridad de la comunidad internacional se vuelven fundamentales para mitigar el impacto y brindar asistencia a las personas afectadas por esta tragedia natural en Taiwán.